Nerea se ha convertido en una de las finalistas expulsada de ‘Gran Hermano’. Con ello, la concursante ha dicho adiós a su amiga Violeta, que se quedó entre lágrimas, y se ha reencontrado en el plató con su novio Luis. Pero también con la polémica y las rencillas entre su madre y su suegra.
Violeta y Nerea se quedaban solas en la ‘Sala de expulsión’ y ya les entraba la pena pensando en separarse. Cuando Jorge Javier Vázquez anunció el nombre de Nerea como la nueva expulsada, las amigas se abrazaron y Violeta le aseguró que ella había sido lo mejor de su concurso. Las concursantes protagonizaban un emotivo momento teniendo en cuenta que cuando se encontraron al inicio del concurso, la guerra estaba viva entre ellas.
Mientras Nerea salía de la casa y llegaba al plató, en el mismo Luis y su madre, Mila, confesaban que su relación estaba de lo más tensa. Jorge Javier Vázquez percibía que ni se miraban y ellos confirmaban que apenas se hablaban.
“El ambiente no está bien pero es verdad que estamos mejor que cuando está Natalia (la madre de Luis) porque cuando está ni me mira a la cara”, aseguró Mila. “Mi madre no está porque pasa de movidas. Por eso no ha venido. El otro día no quiso coincidir contigo por no discutir“, contestó Luis a su suegra. Para Mila, el “no coincidir” era lo mismo que “vetar”.
Cuando Nerea llegó al plató, su madre fue la primera en abrazarla, seguida de Luis. Momentos más tarde, la recién convertida en exconcursante se enteraba de todo lo que había sucedido entre su madre y la de Luis, pero que también él había estado envuelto en ello desde que salió de la casa. “No me hace nada de gracia esta discusión. Mi madre con Natalia… y Luis. Madre mía… Era uno de los miedos que tenía yo, que ellas se peleasen, y se lo decía a Luis. No me gusta de las maneras que se hablan”, fue la primera reacción de Nerea.
Después, se dirigió directamente a su novio: “Cuando habla mi madre quiero que la respetes, porque yo con la tuya lo voy a hacer”, dijo al haber visto unas imágenes de Luis riéndose en un momento de tensión con su madre. Él le pidió que por favor esperase a ver lo sucedido por completo y a hablar las cosas fuera.
Sin embargo, la tensión en el plató comenzó a ir en aumento de nuevo. Mila llegó a decir que mandó un mensaje a Luis cuando fue expulsado y que no fue contestada y que hubo una gala en la que seis presuntos amigos de Luis se habrían reído de Nerea y él lo habría permitido. “Eso es mentira. Y como sigas diciendo mentiras, me voy a ir del plató”, advirtió Luis.
A pesar de todo, Nerea después quiso centrarse en arreglar las cosas con Luis y en mejorar su relación. “He cometido ciertos errores. Tengo inseguridades. Hay muchas personas que me pueden criticar pero no saben todo lo que he vivido atrás con Luis. Hemos vivido muchas idas, venidas, las cosas a medias no funcionan”, explicó. Ambos manifestaban su voluntad de mirar al futuro con optimismo. Y al sonar su canción de Whitney Houston, Nerea y Luis se besaban apasionadamente.
Sin embargo, el momento dulce pronto terminaría para Nerea y Luis. Jorge Javier Vázquez se dirigía después a la grada del plató, donde se encontraban la abuela y los tíos de Nerea. Los familiares de la concursante acusaron a Luis de no saludarles pese haberles visto, y a Nerea le entraba el agobio viendo lo que está sucediendo “entre las personas más importantes de mi vida”, decía.
Luis, que se había justificado al principio diciendo que ellos tampoco le habían saludado a él, al final también acabó entre lágrimas porque “todo lo hago mal”, expresó. Fue Laura quien por echar un cable a Nerea terminó con la tensión: “Pido tanto a la familia como a la pareja que por favor es el momento de Nerea. Tenemos que entender que acaba de salir después de tres meses”, dijo siendo ovacionada por el público. Laura después se acercó a darle un sentido abrazo a Nerea. “Gracias, tía”, susurró Nerea a su compañera.