Spain's Melody performs the song "Esa diva" during the first semi-final of the 69th Eurovision in Basel, Switzerland. EFE/G.Kefalas
Melody, apodada ya en redes como “Esa Diva”, no logró convencer al jurado ni al televoto europeo en Eurovisión 2025, pero se coronó en el corazón de los espectadores españoles. Aunque su clasificación fue discreta en el marcador final, la audiencia le dio una auténtica ovación desde casa: la gran final del certamen alcanzó un impactante 50,1% de cuota de pantalla y 5.884.000 espectadores, convirtiéndose en el programa más visto del día y uno de los más seguidos de los últimos años.
El momento de mayor tensión, el bloque de votaciones, llegó a 59,7% de cuota y 6.315.000 espectadores, confirmando el enorme interés que sigue despertando el festival entre los españoles. A pesar de que Melody no logró traer el ansiado micrófono de cristal, sí consiguió enganchar a millones frente al televisor con una propuesta que no dejó indiferente a nadie.
Pero el fenómeno no acabó ahí. Tras la gala, “La noche de Melody”, el especial emitido por RTVE, también arrasó con 36,6% de cuota y 2.167.000 espectadores, doblando ampliamente a todas las demás ofertas televisivas del prime time. Lejos quedaron el cine de Antena 3 con “El alma de la fiesta” (21% y 749.000), las reposiciones de “Hay una cosa que te quiero decir” (4,8% y 505.000), “First Dates” (3,7% y 445.000), “La Voz Kids” (4,1% y 524.000) o laSexta Xplica (2,9% y 317.000). Incluso el blockbuster de Cuatro, “Paradise City”, solo logró un 4,6% y 596.000.
Un fenómeno con precedentes
Si echamos la vista atrás, Eurovisión 2025 se sitúa como una de las emisiones más vistas del festival en los últimos 25 años. Solo ediciones históricas como la de Rosa López en 2002, que batió récords con un 80,4% de cuota y 12,7 millones de espectadores, o el fenómeno Chikilicuatre en 2008 (59,3% y 9,3 millones) superan los datos de esta edición reciente en términos de interés masivo.
Desde el año 2000, solo nueve ediciones han superado la barrera del 50% de cuota de pantalla. Melody entra directamente en ese club selecto, al nivel de Chanel (2022, 50,8%), Ramón (2004, 50,1%), Pastora Soler (2012, 43,5%), o Alfred y Amaia (2018, también con 43,5%). Su resultado final no hace sombra al eco que ha dejado su actuación en España.
Fracaso europeo, éxito nacional
El caso de Melody demuestra una vez más que Eurovisión no solo se mide en puntos. Aunque su propuesta no sedujera al continente, en casa logró lo que muchos anhelan: convertirse en evento, conversación, tendencia y fenómeno televisivo.
En resumen: Melody no ganó Eurovisión, pero sí ganó la noche.
El festival también marcó el pulso del día en otras franjas. En la sobremesa, “La ruleta de la suerte” volvió a destacar con un 19,1% y 1.280.000 espectadores, mientras que “Antena 3 Noticias Fin de Semana” heredó esa buena tendencia y logró un 21,7% de cuota y 1.847.000 espectadores.
Durante la tarde, el duelo entre programas previos al festival dejó una batalla reñida. El magacín “Fiesta”, presentado por Emma García en Telecinco, se impuso con un 8,2% de share y 634.000 espectadores, superando al especial “La familia de la tele” de TVE, que pese a actuar como telonero de Eurovisión, se quedó en un 7,9% y 556.000 espectadores. En el tramo de coincidencia directa, la ventaja fue más clara: 9,6% frente al 7,9%. Por su parte, Cuatro mantuvo el tipo con la película “Mercury Racing”, que anotó un 7,6% y 638.000 espectadores.