‘Comando Actualidad’ despliega sus cámaras en el Estrecho de Gibraltar, zona por la que entra el 80% del hachís que se consume en Europa. Asiste a una de las mayores operaciones contra el narcotráfico, comprueba cómo y dónde actúan los clanes de la droga en el sur de España y explica por qué los alijos que se concentraban en el Estrecho se dispersan ahora entre Huelva y Almería. La pandemia no frena a los narcotraficantes. El cerco policial se amplía, hay más detenidos, se incauta más droga, pero el negocio ilegal crece.
Mario Montero, reportero de ‘Comando Actualidad’, es testigo de una de las últimas operaciones contra los narcotraficantes realizada por el Grupo de Acción Rápida de la Guardia Civil. 300 agentes hacen registros simultáneos en distintos puntos de la costa. Las redes criminales tienen montadas complejas estructuras en tierra y mar. Ahora la batalla se libra también en el aire: los drones son utilizados por las fuerzas de seguridad para detener a los criminales, y los propios traficantes los usan para burlar los controles. En los últimos dos años, más de 8.500 personas han sido detenidas por narcotráfico dentro del Plan Especial de Seguridad del Campo de Gibraltar.
“Hay menos hachís y más control marítimo. En cada desembarco saco dos millones de euros”, son palabras de Alí, uno de los testimonios recogidos por la reportera Sara Lozano. Se le imputan más de 200 desembarcos en nuestras cosas. Ya ha pisado la cárcel y en este momento está en busca y captura por la Interpol. Ricardo, abogado especializado en derecho penal y conocido como el “abogado del diablo”, lleva 26 años defendiendo a quienes trafican con droga.
En el centro del problema: 65.0000 vecinos, los más jóvenes y el paro. Silvia P. Arroyo, otra de las reporteras de ‘Comando Actualidad’, retrata la vida de quienes habitan en el epicentro de la tormenta perfecta. Los vecinos de La Línea de la Concepción se enfrentan a la realidad diaria y a la estadística: el 70% de los detenidos en 2020 acusados de traficar con hachís tenía menos de 25 años. ¿Cómo es vivir a tan solo 15 minutos de Marruecos, principal productor de hachís del mundo y 30 kilómetros de la Costa del Sol, capital europea del crimen organizado y en una economía que roza el 40% de paro?