La terrorífica pasarela del segundo programa de ‘Drag Race España’

Parece que tras la primera pasarela de ‘Drag Race España’ en la que nuestras reinas desprendieron talento y arte, las concursantes han llegado con ganas de aterrorizar con sus mejores creaciones.

Las 11 reinas en competición han dado lo mejor de ellas mismas y han sorprendido con un terrorífico desfile en el segundo programa.

La temática era ‘El día de la bestia’ y La Zowi, que estaba como jurado invitada en este programa, ha disfrutado muchísimo junto al jurado.  ¡Descúbrelo en ATRESplayer PREMIUM!

Drag Sethlas recuerda su gran éxito… que derivó en ansiedad, estrés y depresión

Drag Sethlas ya lo anunciaba en su presentación de ‘Drag Race España’, tras ocho años en el mundo del drag, además de haber ganado numerosos concursos en Canarias, se ha alzado con la victoria en dos de las ‘Gala Drag Queen’, algo que solo pueden decir tres personas. Por eso, en este segundo programa, ha adelantado que se va a transformar y va a hacer “un show muy canario”.

“Un día estaba de vacaciones en sur”, empezaba contando la reina a sus compañeras antes de desvelar que recibió una denuncia por parte de los abogados cristianos.

“Decían que con mi espectáculo había incitado al odio”, aseguraba. “Me quedé loca”, pero la jueza no vio el delito y archivó la causa.

La concursante ha contado también que recibió presión social por parte de muchos colectivos lo que provocó que cayera en una espiral de ansiedad, de estrés y de depresión.

A pesar del hate recibido en las redes sociales, se queda con todo el cariño que le demostraron, sobre todo en la ciudad Las Palmas: “Yo iba a actuar por ahí y la gente estaba a ‘topísimo’ conmigo”.

La gran lección de Ariel y Onyx sobre la salud mental: “Pedir ayuda es de fuertes”

“Hubo un momento en el que hice click”, asegura Onyx antes de confesar que se estaba olvidando de quién era y ese fue el momento en el que decidió ir a terapia.

La concursante lo achaca a la pandemia, ya que pasó de tener toda su vida construida a no tener pareja, a quedarse sin trabajo y a volver a vivir a casa de sus padres: “Fue como si no tuviera vida. Te ves cayendo a las infiernos”.

Su compañera Ariel desvela que ella comenzó a ir tras sufrir un ataque de ansiedad en el metro: “No veía el momento de conseguir salir”.

“A día de hoy ir al psicólogo es un puto privilegio”, se quejan entre ellas, aunque están de acuerdo en que “pedir ayudas es de fuertes”.