La pequeña chef gaditana Aurora, de 9 años, es la ganadora de la octava edición de ‘MasterChef Junior’. Durante todo el concurso destacó por su madurez, su seguridad, su concentración y su personalidad. Y todo ello lo plasmó en el duelo final, en el que sorprendió con su don para la cocina y su menú inspirado en su familia.
Una media de 1.887.000 espectadores (16% de cuota) siguieron la gran final de ‘MasterChef Junior 8’, donde Aurora, Nicolás, Henar y Javier demostraron su alto nivel culinario y su compañerismo. La final marcó récord de la octava edición y creció respecto a la última entrega de ‘MasterChef Junior 7’ en 232.000 espectadores y 3.5 puntos.
El trabajo de los cuatro fue puesto en valor por Pepe Rodríguez, Samantha Vallejo-Nágera y Jordi Cruz, pero finalmente Aurora se impuso a Nicolás en el duelo final de ‘MasterChef Junior’, el talent de cocina producido por RTVE en colaboración con Shine Iberia (Banijay Iberia). Junto al trofeo de ganadora, se llevó 12.000 euros en metálico y un curso de cuatro días en Basque Culinary Center.
“Me duele la cara de tanto sonreír. Esto es un sueño hecho realidad, un reto cumplido. Este premio lo voy a poner en el centro de mi mesa para que tenga todo el protagonismo”, afirmó tras escuchar su nombre en boca de Pepe Rodríguez. “El trabajo y el esfuerzo, una vez más, ha tenido una merecida recompensa”, sentenció el jurado.
Para el gran duelo final, Aurora abrió el apetito de los jueces y de Oriol Castro y Mateu Casañas, chefs del restaurante ‘Disfrutar’ con dos estrellas Michelin, con un entrante a la altura: tartar de gamba blanca con aire de remolacha y jengibre. “Es un snack perfecto”, afirmó Samantha Vallejo-Nágera. Pepe Rodríguez puso en valor el equilibrio de esta elaboración: “Es maravilloso. Es un bocado que te descubre la sutileza de la gamba, la remolacha y el jengibre”.
Aurora continuó con una lubina a baja temperatura con salsa de gamba roja y multiesférico de aceituna. “Es una combinación mediterránea perfecta. Y además estéticamente es indiscutible”, según Jordi Cruz. “Es de 10”, sentenció Mateu Casañas.
Como sello final, elaboró un helado de mango, velo de fruta de la pasión y espuma de yogur, con una dedicatoria especial para su abuela, de la que tanto aprendió. Para Pepe Rodríguez este postre fue un paso más allá: “La técnica de la gelatina es perfecta. Es un dulce técnicamente impecable”, destacó.
Nicolás optó por un menú homenaje a Sevilla con protagonismo de las raíces de su tierra. Para abrir boca, elaboró una crema fría de maíz con cigalas y huevas de tobiko y como entrante preparó unos raviolis de calabaza y queso de cabra florida con confitura de naranja y esféricos de albahaca. El punto y final lo puso con un helado de almendra con espuma de coco y cúpula de caramelo.
Durante este duelo final, Nicolás y Aurora tuvieron palabras de ánimo entre ellos durante el último cocinado, poniendo de relieve que la alta cocina tiene cada vez más peso entre los más pequeños, y que el compañerismo y la rivalidad bien entendida han sido pilares básicos de ‘MasterChef Junior’ una edición más.
Los otros dos semifinalistas, Henar y Javier, demostraron también su alto nivel culinario. Aunque se quedaron a las puertas después de dos duras pruebas, la primera siguiendo al chef Jesús Sánchez y la segunda preparando un menú de ‘Aponiente’, se entregaron y esforzaron al máximo.